Amante del océano suspira brisas salinas. Historias de amarres fugaces y romances de libre albedrío se pierden en sus calles humedecidas. Resulta fascinante recorrer la ciudad de Bahía Blanca y su entorno portuario de casas de chapa, caminos adoquinados y típicas cantinas en Ingeniero White. Destino de importante vida social, te invitamos a conocer su esencia.
Bahía Blanca es el centro urbano más importante del sur de la provincia, una gran plaza comercial, industrial y de servicios con un importante patrimonio arquitectónico y una intensa producción artística y cultural. En su traza se destaca la Plaza Rivadavia, ubicada en el centro de la ciudad y rodeada de edificios lujosos de los siglos XIX y XX como el Palacio Municipal. Entorno a este lugar se realizan caminatas turísticas – organizadas por el municipio- para descubrir las fabulosas edificaciones que nos remiten al viejo continente y a sus costumbres.
Además posee el mayor puerto nacional de aguas profundas, Ingeniero White, apto para recibir cruceros. Un imperdible de este atractivo rincón de la ciudad es el Paseo del Puerto, un espacio recreativo junto al mar donde pueden apreciarse desde lanchas pesqueras artesanales hasta grandes barcos. También se puede encontrar el Museo del Puerto, dedicado a la historia del lugar, donde se estimula el recuerdo a través de objetos de uso cotidiano de otras épocas; y el Museo -Taller Ferrowhite, donde se exhiben más de 5.000 piezas ferroviarias y portuarias.
Finalmente y para los amantes de la aventura, se pueden realizar excursiones embarcadas. En esta experiencia se puede optar por varias alternativas como realizar safaris fotográficos para descubrir la flora y fauna del lugar; recorridos de ecoturismo para acercarse a la naturaleza de una manera sostenible; y paseos exploratorios para descubrir islas y naufragios.
¡Descubrí sus encantos!